¿Poemas malos?
PV Marie
La fiesta fue muy aburrida, o buena, así la
sentí yo… cuando llego la hora de irnos Luis me llevo a mi casa fue una semana
tranquila, cada día me sentía mejor, en verdad hablar era algo que me hacía
bien, y con Luis podía hablar horas… el viaje hoy y empezaba a sentirme con la
confianza de volver a la vida que aunque fuera la peor, tenía que vivirla… ese día
decidí que sería la Marie que hace mucho había metido a una caja, deje mi
cabello suelto, me supe una camiseta blanca un poco femenina, unos jeans azules
y mis converse, deje que mis ojos vieran con claridad por primera vez en mucho
tiempo… cuando baje para desayunar mi papá me miro con los ojos muy abiertos de
la sorpresa.
— ¿Dónde se había escondido mi Marie?
—Ya está aquí de nuevo, así que se feliz
Desayune rápido y me fui directo a
aeropuerto, eran 10 horas de viaje así que nos iríamos muy temprano, le pedí al
chofer que bajara todas mi maletas y me acerque hacia donde estaba el maestro
con el mi grupo, un chico que era amigo de Luis se acercó a mí, algo que me pareció
muy extraño
—Hola—dijo— ¿necesitas ayuda?
— ¿ayuda? ¿Para qué?
—bueno es que pareces perdida, digo todos
los del grupo vamos en un viaje escolar—El muy idiota no me reconoció
— ¿ah sí?
—Hey Pedro, ¿Has visto a Lorena?—ese era
Luis—dijo que estaba con el grupo B, pero la busque y nada
— ¿Qué no ves que estoy ocupado—Dijo Pedro
—A si, Hola—Me saludo
—Hola—dije sin ánimo, él no se había dado
cuenta tampoco quien era.. O eso creía yo, pues se volteo y me miró fijamente
de nuevo
—Tus ojos me recuerdan a Canadá —Yo sonreí,
pues si me había reconocido—¿Pero qué te hiciste?
—Esta soy, es un largo cuento, pero en el
avión te lo explico
—¿Me pierdo de algo?—Pregunto Pedro molesto
por sentirse excluido
—¿Qué no la reconoces? Es Marie
—¿Marie? ¿La rara de la clase?
—Bueno, creí que serían más creativos al
buscarme un apodo
Me fui de ahí, no molesta más bien
irritada, Luis me siguió, llevamos las maletas a revisión, y luego a esperar
para abordar el avión, una vez dentro Luis hizo las preguntas que seguro se moría
por hacer
—¿Explica todo?
—Cuando Ángel murió, yo ya no quería ser
Marie la chica linda, que a pesar de ser extraña todo mundo la veía hermosa,
pues yo solo quería ser hermosa para él, así que me puse una peluca, compre
ropa holgada y unos lentes de contacto color negro
—Entonces tus ojos son verdes
—Exacto
—Que lindos, te ves muy linda… bueno
siempre has sido linda… bueno aun con la peluca y todo eso—Luis se veía un poco
nervioso
—Gracias
En cuanto el avión despego me quede
dormida, recostada en el hombro de Luis, lo extraño fue que no soñé nada… al
cabo de un rato me desperté, pues Luis parecía estar molesto, me incorpore poco
a poco para preguntar qué le sucedía
—Quiero escribirle una poesía a Lorena…
pero parece que solo me inspiro cuando son para…—se calló de golpe
—¿Para quién?
—Para nadie, cuando son para nadie
—Pues piensa que son para nadie
El sonrió y continúo intentándolo… Cuando
llegamos a Washington, mientras salíamos del avión Luis me tomo la mano para
evitar que me perdiera entre tantas personas y así hasta que estábamos
recogiendo las maletas, donde lo esperaba Lorena, quien me miró fijamente y
luego nuestras manos, se acercó aparentemente furiosa
—¿Quién es ella?—sí que estaba molesta
—Hola Lorena—quite rápidamente la mano de
Luis—Soy Marie
—si mi amor, ella es Marie, luego te
explico todo, ahora ven que quiero darte algo
Luis se fue con Lorena y yo fui por mi
equipaje, todo parecía estar bien, hasta que vi a Lorena moleste alejarse de
Luis, me pareció muy extraño, pero no me importo… me fui directo al autobús
donde iba mi grupo, ahí sentado casi al final estaba Luis con la cara entre las
manos, me senté junto al por costumbre, pero no me hable
—creo que soy un asco con los poemas
—no debió ser tan malo
—¿quieres que lo recite?
—No
—ok ahí va—¿para qué pregunta?—“Quien fuera
tan bella, como lo eres tu; Quien fuera tan única, como lo eres tu; quien fuera
tan tierna, como lo eres tu; quien tuviera ojos, como los que tienes tu; quien
tuviera labios, como los que tienes tu; Las pequeñas cosas de las que me
enamoro yo”—si era un buen poema
—¿pues a mí no me parece malo?
—Creo que a Lorena si le pareció
—no te preocupes, ella te adora, ya se le
pasara
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