Universitaria - Capítulo
I - Orientación
PV Abril
La vida en la
universidad es lo más emocionante que puede existir y puede estar llena de
mucho drama. Mi primer semestre de universidad estaba a punto de iniciar y nunca imagine que sería tan complicado, y no
hablo precisamente de las clases, pues para un genio, lo que menos le preocupan
son las clases. Universidad de Lourdes, está ubicada en uno de los lugares
perdidos de Ohio, muy cerca de Michigan, un pequeño y adorable pueblito
llamado, Sylvania. Seria aquí donde pasaría 4 años de mi vida, luchando por mí
meta de ser una psicóloga escolar.
Hoy era el día de
mudanza, y junto con la mudanza vendría la orientación para los nuevos alumnos,
sería mi oportunidad de conocer los que serían mis amigos, enemigos y
compañeros durante 4 largos años. Estaba a 30 minutos de camino, había estado
manejado ya 7 horas desde Washington DC, donde estaba toda mi familia, y donde
había dejo todo atrás para comenzar mi nueva vida. Cuando por fin entre en la
ciudad de Toledo, mi corazón empezó a acelerarse como si estuviera a punto de
saltar de mi pecho y al ver el letrero en el cual se leía “Welcome to Sylvania”
mi sonrisa no cabía en mi cara.
Entrando al complejo
donde se encontraban los apartamento para los estudiantes se leía un letrero de
bienvenida, un grupo de estudiantes con camisas azules estaban esperando en la
entrada para guiar a los nuevos estudiantes que no sabía dónde vivirían, aunque
yo ya lo sabía, había leído mil veces la carta en la cual me decían el nombre
de mi edificio y el de mi compañera de habitación. Pioneer 4840, apartamento número
108.
Al llegar a la entrada del
edificio en el que vivirá mi primer año de universidad, había una mesa, un
hombre robusto estaba sentado junto a uno de piel morena, pero más delgado. El
hombre robusto tomo una foto para usarla en mi identificación mientras que el
otro me hacía preguntas sobre mi licencia y las típicas regulaciones. Un grupo
de chicas se acercaron a mí para ayudarme a descargar mi auto y meter todas mis
cosas dentro de mi apartamento.
—Mi nombre es Abby— dijo
la rubia
—Soy Tabby— dijo la pelirroja
—Y yo Larissa— dijo la
castaña
—Mi nombre es Abril, es
un placer conocerlas a todas
Me ayudaron a cargar
todas mis cosas, mi apartamento estaba en el sótano, lo cual en su momento me
disgusto un poco porque no tenía una ventana grande, pero con el tiempo comprendí
que fue lo mejor que me puso suceder, era de las primera en llegar, había
estado manejando toda la noche y madrugada para estar a las 9am en la escuela,
mi compañera aún no había llegado así que tome mi la cama cerca de la ventaja. El apartamento no era tan grande
pero era suficiente para dos personas, la cocina y la sala estaban separadas
por la mitad de una pared, el baño estaba justo al lado de la habitación. En cuanto estuve
instalada las chicas se fueron, me asome por la ventana y vi llegar a un chico
apuesto de cabello rojo, se bajaba de un auto deportivo blanco y tras el seguro
venia su mama. Luego vi a un chico de cabello largo con una camiseta sin
mangas, junto a el quien supuse seria su papa y mama. De repente se abrió la
puerta y ahí estaba quien sería mi nueva compañera de habitación y esperaba mi
amiga. Las mismas chicas que me habían ayudado estaban ayudándole a ella, me
acerque a saludarla en cuanto entro
—Hola—dije muy animada—mi
nombre es Abril
—un placer conocerte—dijo
ofreciéndome su mano—mi nombre es Evelyn
Ayude a las chicas y a
Evelyn a llevar las cosas de Evelyn hasta el apartamento y a que se instalara.
Teníamos una hora y media hasta que diera inicio la orientación. Evelyn y yo
hablábamos de los lugares de los que veníamos y que estudiaríamos, ella
estudiaría admiración y yo psicología. Salimos de nuestro apartamento y nos
dirigimos al campus principal donde daría inicio la orientación. Todos los
nuevos fuimos dirigidos hasta un salón de eventos donde padres se despedían de
sus hijos y nuevos amigos venían a la vida de todas las personas nuevas. Había
mesas con llaveros con nombres, Evelyn y yo fuimos a buscar nuestros nombres,
estábamos en el mismo grupo. Luego de la despedida, todo fuimos conducidos
hasta el auditorio donde conoceríamos nuestros líderes. Los de mi grupo eran
Bill, un chico guapo rubio. Kevin el chico timidito. Baile la chica callada. Lo
primero que pensé al verlos es que mi grupo no podía ser peor.
—Bueno chicos, todos
estamos muy emocionados de que estén aquí y que sean parte de nuestro grupo,
ahora que ya nos conocen es hora que se presenten ustedes.
—Mi nombre es Kevin,
estoy aquí desde Rochester, New York—dijo el chico de cabello largo que había
visto entrar en el edificio
—Mi nombre es Shannon.
Barbenton, Ohio—La típica rubia con la voz chillona
—Evelyn. Alexandria, Virginia
—Abril. Washington DC
Así cada uno se fue
presentando. EL primer día solo consistía en conocer a nuestro grupo y aprender
algunas reglas. Luego de la reunión todos regresamos a nuestros apartamentos
para tener otra reunión con los asistentes de residencia.
—Mi nombre es Katlyn y seré
su nueva asistente de residencia, o como otros nos llaman RA—con la mirada
puede notar quienes eran los otros que vivirían en el mismo edificio que yo.
Dos chicas del equipo de soccer, 5 chicos del equipo de baseball, un chico del
equipo de basketball, dos chicos del equipo de lacrosse y el pelirrojo sexy—Solo
diré y luego todos estarán libres—Katlyn parecía una persona muy tranquila, lo único
que esperaba era que no me diera problemas. —tomen decisiones inteligentes y no
tendrán problemas conmigo.
Fue lo último que dijo
para luego conducirnos hasta un lugar llamado Den, el cual estaba a solo unos
pasos de mi edificio. Al llegar nos dieron una camisa blanca con el nombre de
la universidad y un marcador, la fiesta consistía en firmar las camisas de los
otros y conseguir firmas. Cuando la fiesta termino, Evelyn y yo nos dirigimos
al apartamento. Este fue el fin de mi primer día en la universidad.
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